Noticias del Campo

Fondo internacional para reducir uso de agroquímicos en México, anuncia PNUD

En casi tres décadas el uso desregulado de pesticidas y fertilizantes en México se incrementó 100%, ubicando al país como el décimo primer consumidor de estos productos en el mundo. Esto a pesar de su impacto negativo en suelos, agua, alimentos y biodiversidad, lo cual afecta los ecosistemas y a los seres vivos que los habitan.

En este escenario surge el proyecto Farm+ Financiamiento para la reducción y gestión de agroquímicos en México, el cual es ejecutado por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) como agencia implementadora, que cuenta con un donativo de 7.5 millones de dólares por parte del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés), además de cofinanciamiento de más de 70 millones de dólares.

El programa, que se implementa en siete países, “busca incrementar la adopción de prácticas agrícolas sostenibles y resilientes al clima reduciendo el uso de agroquímicos nocivos para la salud humana y de los ecosistemas”.

La proyección es que con las prácticas y medidas aplicadas, en cinco años se cuente con 839,000 hectáreas bajo prácticas mejoradas de producción sostenible; reducir 167,800 toneladas de CO2e y disminuir el uso de 2.460 toneladas de agroquímicos en territorio mexicano.

El proyecto tendrá cobertura nacional, con áreas de implementación a escala demostrativa en los estados de Chiapas, Jalisco, Veracruz, Tamaulipas, Michoacán, Chihuahua, Estado de México, Guanajuato, y Sinaloa, con lo cual se espera beneficiar a 5.6 millones de personas (2.8 millones de mujeres y 2.7 millones de hombres).

Uso intensivo de agroquímicos en México

En su diagnóstico, el PNUD indica que el uso de agroquímicos se incrementó 100% entre 1990 y 2018. En 2024, el mercado de agroquímicos en México se estimó en mil 370 millones de dólares (mdd) y se espera crezca a mil 680 mdd (4.10% de crecimiento anual).

El uso de fertilizantes pasó de 105.6 kilos por hectárea en 2017 a 106.6, en 2020. Las importaciones incrementaron 44.7% de 2020 a 2021, siendo Veracruz, Tamaulipas, Jalisco, Chiapas, Michoacán, Chihuahua, México, Guanajuato y Sinaloa, los estados en que más los utilizan.

El PNUD remarca que los residuos de los agroquímicos “se dispersan en agua, suelos y los propios alimentos, afectando a los ecosistemas y creando potencialmente zonas muertas en mares, como el Golfo de México. Esto pone en peligro a la flora y la fauna que son cruciales para la agricultura”.

El organismo señala que mientras el uso de fertilizantes y pesticidas se ha incrementado, la superficie de uso agrícola ha permanecido prácticamente sin cambios entre 2007 y 2022 (29.9 millones de hectáreas y 29.8 millones, respectivamente),

lo anterior evidencia prácticas más intensivas en el uso de agroquímicos por hectárea”.

Por otro lado, el PNUM refiere que los sistemas agroecológicos en México son heterogéneos, siendo los más comunes aquellos sistemas de traspatio y parcelas agroforestales pequeñas de café, cocoa, caucho y árboles frutales. “La expansión del mercado de productos orgánicos, nativos y sus productos ha promovido el uso de sistemas agroecológicos entre los productores no tradicionales”.

Farm+Financiamiento para la reducción y gestión de agroquímicos en México implementará del año 2026 al 2031, “periodo en el cual se buscará contribuir a reducir la degradación de ecosistemas y la pérdida de la biodiversidad, además de promover la gestión sostenible del agua en la agricultura. Lo anterior, al fortalecer la coherencia y coordinación intersectorial entre los marcos de política y regulación a nivel nacional y subnacional”.

En la actualidad, detalla el PNUD, el Farm+ “se encuentra en la fase de preparación, etapa en la que se realizarán estudios técnicos justificativos para delimitar y priorizar las regiones de trabajo, con base en los agroquímicos nocivos de mayor uso y los cultivos prioritarios para el sector. partes interesadas, incluidos pueblos indígenas, comunidades locales, mujeres y juventudes.

Para alcanzar sus objetivos, “el proyecto contribuirá a fortalecer diversos mecanismos de financiamiento que permitan transitar hacia una agricultura más sostenible y resiliente al clima, mejorar las cadenas de suministros en la agricultura, al tiempo que se reducen emisiones y el uso de residuos plásticos. Adicionalmente, se buscará implementar, a nivel demostrativo, prácticas innovadoras que contribuyan a reducir el uso de agroquímicos en cultivos prioritarios”.

En 2026, dará inicio la segunda fase que incluirá a México como uno de los países prioritarios debido a su relevancia en la región.

El diagnóstico del PNUD indica que en territorio mexicano, “el impacto del cambio climático, traducido en el incremento de la variabilidad climática y en la frecuencia en la que pueden presentarse condiciones extremas, puede implicar, según pérdidas proyectadas en los cultivos más importantes, hasta 37,934 millones de dólares, cifra que equivale al doble de la producción anual agrícola total del país”

En el documento, también refiere que en 2023, 23.4 millones de hectáreas de México estuvieron dedicadas al uso agrícola. De las personas dedicadas al cultivo de esas tierras, 85% fueron pequeños y medianos productores, conforme a los datos del Censo Agropecuario. Además, la contribución, en ese mismo año, del sector agrícola al Producto Interno Bruto (PIB) se ubicó en 4%, según datos del Banco Mundial, haciendo de México el tercer mayor productor agrícola de América Latina y el doceavo productor de alimentos en el mundo. Ello refleja la importancia que tiene el sector para el país y el planeta.

Fuente: Imagenagropecuaria.com

Artículos Relacionados

Back to top button