Procesamiento de carne de ave y cerdo en EE. UU. podrá operar con líneas más rápidas

El Servicio de Inspección y Seguridad Alimentaria de Estados Unidos (FSIS, por sus siglas en inglés) anunció la ampliación de las exenciones que permiten a las plantas procesadoras de carne de cerdo y pollo operar a mayores velocidades de línea e iniciará un proceso normativo para hacer permanentes estos incrementos.
Extensión de la exención y proceso normativo
Desde enero, la administración de Joe Biden inició estas medidas en un programa de prueba para plantas cárnicas participantes, el cual incluía que las instalaciones debían presentar datos mensuales sobre seguridad en el trabajo para poder ser evaluados en dos estudios sobre el impacto de las velocidades del procesamiento cárnico.
Esto se ha analizado por el Congreso estadounidense para poder hacer permanente la regulación en la próxima Ley Agrícola.
Otra medida favorable para la industria fue la eliminación de la obligación de presentar datos redundantes sobre seguridad laboral. Según el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), varias investigaciones han demostrado que no hay un vínculo directo entre la velocidad de procesamiento y el aumento en las lesiones de los trabajadores, lo que llevó a la agencia a modificar estos requisitos.
Impacto en la industria cárnica
El Instituto de la Carne de Estados Unidos celebró esta decisión y destacó que se eliminarán obstáculos burocráticos que afectaban la producción eficiente de carne y productos avícolas. También señaló que la medida permitirá fortalecer la cadena de suministro y mejorar la competitividad del sector.
La Secretaria de Agricultura, Brooke Rollins, reafirmó el compromiso del USDA de reducir la carga administrativa, eliminar requisitos innecesarios, reducir los costos para la industria pecuaria y mejorar la eficiencia sin comprometer la seguridad alimentaria del país.