CELAYA, Guanajuato. Con el incremento en el almacenaje de agua en la Presa Ignacio Allende, que actualmente va a un 49%, los productores de la zona norte de Celaya tienen fe en que mejoren las condiciones para el campo y el siguiente año sí se puedan realizar los dos ciclos agrícolas (primavera-verano y otoño-invierno).
Son alrededor de 3 mil productores de Celaya, cuya siembra depende del agua que tradicionalmente se desfoga de la Presa Ignacio Allende por lo que esperan que siga lloviendo lo suficiente.
José Palma, presidente del Distrito de Riego 085 margen izquierdo, señaló que este 2021 es la primera vez que no hubo ninguno de los dos ciclos agrícolas debido a que no se tiene agua para el riego.
Explicó que son alrededor de 12 mil hectáreas y unos 3 mil productores del Distrito de Riego 085 del margen izquierdo y del margen derecho, los que se vieron afectados en este 2021 por la falta de lluvias el año pasado y esperan que se mejore la situación para el siguiente año.
“Este año ya no hubo agua, esta captación de agua serviría para el otoño-invierno y primavera-verano del 2022. En este año sembraron los que pudieron conseguir agua de pozo, no fueron muchos. Se necesita una temporada de lluvias abundante para poder sembrar el ciclo 2022”, dijo José Palma.
Palma Ramírez dijo que van dos años de sequía que ha afectado bastante al campo, en el caso particular de los productores de la zona norte, hubo campesinos que tuvieron que buscar otra entrada de dinero diferente a la siembra.
“Yo siembro jícama y ésta requiere de mucha agua, varios riegos y no pude conseguir agua, hay quienes sí sembraron porque tienen pozo o pudieron conseguir agua o pagarla, en mi casa no fue así y preferí no sembrar y mejor dedicarme a otras cosas, tengo varios oficios y una tienda de abarrotes que fue a la que le tuve que echar ganas para sacar adelante a mi familia”, dijo Manuel Cabrera, productor de San Juan de la Vega.
Así como Manuel, otros productores del Distrito de Riego 085 dijeron tener fe en que siga lloviendo y que se recupere la presa.
“Aunque hay personas que se ven afectadas por las lluvias, nosotros lo que más pedimos es que llueva mucho y todos los días, para que se pueda recuperar, este año no nos dieron agua porque no había, esperamos que para el siguiente año sí alcance”, señaló Patricio Ortega.
La Presa Ignacio Allende estuvo el año pasado a un 23% de su capacidad y en todo lo que va del año a un 15% -desde hace 52 años no había estado así-, ahora que con las últimas lluvias se está recuperando y ha llegado hasta este viernes a un 49%.
En las tierras de siembra de Celaya que dependen del riego de la Presa Allende se siembran los cultivos tradicionales como: trigo, maíz, cebada, pero también jícama, alfalfa, zanahoria, frijol, sorgo, maíz, cebolla, ajo, entre otros.
En las tierras de siembra de Celaya que dependen del riego de la Presa Allende se siembran los cultivos tradicionales como: trigo, maíz, cebada, pero también jícama, alfalfa, zanahoria, frijol, sorgo, maíz, cebolla, ajo, entre otros.
En el caso del Distrit0 085 en el margen derecha, son 8 mil hectáreas (de 26 ejidos y la pequeña propiedad) que representan a 2 mil 300 usuarios. En esta zona se siembra principalmente sorgo, maíz, frijol, hortalizas cebollas, zanahoria, repollo, lechuga, jícama.
En módulo margen izquierda son 2 mil 300 hectáreas que representa a 530 usuarios de este módulo de riego, en esta zona se siembra maíz, frijol, sorgo, jícamas, cebollas, zanahorias y alfalfa y los afectados serían 800 familias que dependen directamente y 800 empleos que se generan de manera indirecta.
En otras partes del estado sí hubo ciclo agrícola primavera-verano, sobre todo en aquellas zonas donde alcanza a llegar el agua de la Presa Solís.
Roberto Castañeda, Subsecretario de Administración y Eficiencia de los Recursos Naturales del Sector Rural de la Secretaría de Desarrollo Agroalimentario y Rural (SDAyR), señaló que es un porcentaje importante, luego de que durante varios meses la presa mantuvo un almacenaje de un 15 por ciento.
Se recupera de un bajo histórico
Durante todo el presente año, la Presa Ignacio Allende se había mantenido en un 15% de su capacidad de almacenaje, pero con las lluvias de las últimas semanas por fin ha subido a un 48% de su Nivel de Almacenamiento Máximo Ordinario (NAMO).
En toda una década, la Presa Ignacio Allende no había tenido tan poco almacenaje de agua, el año pasado se mantuvo en alrededor de un 23 % de su capacidad y fue disminuyendo al paso de los meses. En enero y febrero del presente año se había mantenido entre un 15 y un 16%, hasta junio que llegó a un 23%.
Aunque el nivel de almacenamiento ha incrementado, aún es bajo a comparación de su capacidad máxima que es de 125 millones de metros cúbicos (125.120 hm3), sin embargo a comparación de los niveles presentados el año pasado ya aumentó el doble.
En junio llevaba un almacenaje de 28.9 millones de metros cúbicos, que equivale al 23 % del almacenamiento total en el rango ordinario; actualmente lleva 60.639 millones de metros cúbicos.
Fuente: Periódico Correo
